Vale, ya me he cansado, estoy harto, harto de la tontuna autonómica. Que se diga de una vez por todas, que quede escrito, negro sobre blanco como se dice por ahí o violando la virginidad del papel con el semen de la tinta como dijo aquél: el Estado de las Autonomías es una gilipollez. Tacatá, dicho está y escrito.
España no es especialmente diversa, es un país geográficamente moderado, humanamente mesurado, meteorológicamente divino, no tiene grandes ríos ni lagos ni montañas, no tiene grandes desiertos o selvas, no tiene unos mares tremebundos que suponga ciertas tragedias en la costa, ni llueve ni nieva ni mucho, ni poco y un canario se parece más a un vasco que un pastún a un azara.
Una de las razones al determinar las Autonomías en España fue la distinta forma de hablar, es decir, lo que llamaron los idiomas. El único idioma distinto del castellano es el vasco y tiene unas raíces distintas de la latina. No se les entiende al hablar ni al escribir, es un idioma distinto, con un origen distinto. Lo que queda un poco raro es la castellanización del euskera o euskara, como cuando se lee en las señales de tráfico de prohibido aparcar, "kargoa y deskargoa", suena un poco macarrónico, pero bueno.
El catalán no es un idioma, es un dialecto del castellano y del francés, pero claro, ellos se empeñaron y a ver quién les dice que no, lo mismo que el valenciano y el mallorquín, que pretenden los catalanes que son dialectos del catalán. Narices. El gallego tres cuartos de lo mismo, un dialecto y no digamos el bable, que cuando estás por aquellas tierras, ves que rotulan en las dos lenguas, en castellano y en bable, y es lo mismo, pero terminado en U. En otras ocasiones rotulan dos veces lo mismo con letras distintas. Paponás, hable usted como quiera pero no se gaste los cuartos del prójimo en sandeces.
A los originarios de otras tierras les digo que se esfuercen por entender la lengua del lugar en que viven o trabajan y no esperen que permanentemente les estén traduciendo. Si tú vas a Letonia, te hablan en letón y si no entiendes te jodes y aprietas el culo.
Para colmo crearon las Autonomías con el culo, dejando provincias autónomas porque no sabían a quién asociarlas y agregaron otras que no tenían nada que ver. Así, algunos andaluces quieren dos andalucías, la oriental y la occidental, hay quién dice que no tiene que ver un granaíno con un onuvense. Pero los jerezanos no quieren ser de Cadiz, y los gijoneses quieren separarse de Oviedo y los bercianos quieren separarse de León, lo mismo que los maragatos y León quiere ser autónomo con Salamanca y Zamora, y Albacete no quiere estar junto a Castilla La Mancha que quiere estar con Murcia como toda la vida de dios y estos dicen que tururú y los araneses, y...
Al final quedaron autonomías uniprovinciales y dos ciudades autónomas: bolotás. Murcia autónoma es una gilipollez; Cantabria una tontá; La Rioja un invento ridículo; Asturias no tiene razón de ser, una paponá; y las Ciudades Autónomas, bueno, pues innecesario.
-Oiga, que yo soy manchego pero del Campo de Montiel, ¿eh?, que tengo una diferencia sustancial con los del de Calatrava y San Juan. -Pues yo de Tierra de Barros, que tenemos un hecho diferencial con los de las tierras del Pan y del Vino - Pues nosotros somos sagreños, y los jareños son unos maricones que nos quitan lo que nos dan para todos...
Las Autonomías se crearon para descentralizar y se han convertido en la España de los Reinos de Taifas. ¡Qué poco aprendemos de la Historia! ¿Qué pasó? Y encima Cataluña y el País Vasco quieren independizarse. Pues si hombre, haceros un continente, ¡no te jode!
Quién si merece una Autonomía por su situación geográfica y su hecho diferencial es las Islas Canarias, coño y bien poca guerra que dan.